La Habana, 26 feb (ACN) Samira Addrey, miembro de la junta directiva de la organización estadounidense IFCO-Pastores por la Paz, afirmó que la colaboración de Cuba en salud es una proeza y un bastión de esperanza para mucha gente del mundo.
En entrevista a la agencia Prensa Latina, Addrey, egresada de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) en 2020, subrayó que en este tiempo de agresividad contra Cuba se debe destacar su labor en cuanto a la salud y la colaboración internacional.
“Yo creo que el ejemplo de la ELAM que después de 25 años continúa produciendo médicos para el mundo es una prueba clara de que Cuba ha exportado al mundo salud, amor y amistad mientras que Estados Unidos sigue exportando violencia”, dijo.
De acuerdo con la doctora, Estados Unidos tiene una estructura rota de salud, donde la gente de bajos recursos económicos no cuenta, que no se centra en el ser humano.
En contraste, reconoció la formación recibida en Cuba como médico de ciencia y conciencia, y subrayó que en la isla se forma un tipo de profesional de la salud que es humanista y solidario.
Aseguró que la tarea de los egresados de la ELAM, como Cuba les ha formado, es regresar a sus países y enfocarse, siendo ejemplo de que otro mundo es posible.
Cuba me abrazó y me trató como una hija durante los años que estuve allá; además de las habilidades médicas que aprendimos en la escuela de medicina hay un nivel de familia, de sentido de ser humano que yo no lo he experimentado en otro lugar, confesó.
Addrey atiende el programa de la ELAM en IFCO (Fundación Interreligiosa para la Organización Comunitaria), grupo fundado en 1967 por Lucius Walker (1930 - 2010) y que tiene décadas de experiencia en el movimiento de solidaridad con Cuba.
En la entrevista, la doctora nacida en Ghana destacó la defensa del legado del reverendo Walker y de la confianza en la formación de médicos para sus comunidades en la nación caribeña.