Ciego de Ávila, 25 nov (ACN) En cada elaboración están presentes las recomendaciones de Fidel, asegura Maité Cruz Hidalgo, gestora del proyecto de desarrollo local Fábrica de Quesos Las Margaritas, con el compromiso de lograr producciones variadas y de alta calidad, utilizando recetas familiares centenarias, además de condimentos y yerbas aromáticas que realzan el sabor de algunos quesos criollos.
Al dialogar con la Agencia Cubana de Noticias subrayó que el éxito alcanzado por ese emprendimiento también está relacionado con la atención a las enseñanzas del líder histórico de la Revolución cubana a los maestros queseros de esta isla.
Hay que reconocer ―dijo― que fue una de las personas que más hizo por la ganadería y la industria láctea, considerando que desde los primeros años de la Revolución incentivó esas producciones y valoró su importancia.
Una de las acciones que realizó fue la búsqueda de jóvenes con aptitudes para formarse como maestros queseros en naciones europeas, quienes luego se desempeñaron en diferentes industrias, con el compromiso de mantener por siempre vivas las enseñanzas e iniciativas para elevar la calidad de manera constante.
En la mayor de Las Antillas se elaboraron hasta mil variedades de quesos, por tanto, el Movimiento de Maestros Queseros de Cuba ocupó un lugar cimero entre sus similares en América Latina, lo que ha sido motivo de orgullo; en tanto, la excelencia de las preparaciones ha sido avalada por expertos de diferentes latitudes.
Conocedora de la historia del gremio que con orgullo integra e impulsa desde su espacio en el municipio de Ciro Redondo, en la provincia de Ciego de Ávila, Maité refiere que el Comandante en Jefe estuvo siempre pendiente de la labor de los maestros queseros, incluso probaba los productos y daba indicaciones a partir de sus conocimientos sobre el tema.
Esos criterios eran muy respetados y se reconocía, sobre todo, el hecho de que esta figura de alto nivel, al visitar las industrias, intercambiara con los maestros queseros y obreros, de manera que las sugerencias llegaban directamente a los encargados del proceso.
A pesar de la afinidad y el acercamiento que se logró, Fidel jamás aceptó que le obsequiaran uno de esos productos, lo que reafirmó su sencillez y humildad, comentó con admiración la productora avileña.
Hay un queso muy conocido en Cuba, denominado El Favorito ―con sabor exquisito al incorporar condimentos como el ajo y pimienta negra―, que se elabora a partir de recomendaciones precisas de Fidel y, una de las variedades de ese producto lácteo, se fabrica en Ciego de Ávila, donde sustituyen la pimienta negra por ají cachucha, con lo cual surge el denominado Majial, queso especiado reconocido a nivel mundial.
Inspirado en Fidel, el Movimiento de Maestros Queseros de Cuba, conserva a algunos de sus fundadores, en su mayoría vinculados al Instituto de Investigaciones para la Industria Alimentaria y con la misión de formar los futuros integrantes de una organización que pretende agrupar a productores de entidades estatales y no estatales.
Cruz Hidalgo significó la notoriedad y el espacio que han ganado los últimos en el mercado, debido a la calidad de las producciones, y mencionó emprendimientos como El Olivo, en el poblado de Viñales, de la provincia de Pinar del Río; El Cabrito y Santana, en el territorio de Artemisa; y la Fortuna, en el municipio capitalino de Boyeros; además de reconocidas minindustrias de Camagüey y Villa Clara.
El pensamiento estratégico de Fidel trasciende y adquiere especial relevancia en la actualidad, cuando constituye imperativo aumentar la producción de alimentos como el queso para satisfacer demandas de la economía y la población.
En este contexto urge rescatar la producción ganadera, generalizar las buenas prácticas, elevar la calidad y trabajar para sustituir las importaciones de este codiciado alimento.