Sancti Spíritus, 22 feb (ACN) Luego de varias campañas con resultados muy desfavorables, los tabacaleros de la provincia de Sancti Spíritus cumplieron con la siembra de las mil 320 hectáreas (ha) comprometidas en la actual contienda y, de acuerdo con expertos, las primeras vegas sobresalen por la calidad de la hoja.
Al decir de Isidro Hernández Toledo, director agrícola de la Empresa de Acopio y Beneficio de Tabaco en el territorio, aun cuando la etapa óptima para la plantación se concentra en noviembre y diciembre, el proceso se extendió hasta la primera decena de febrero y ello permitió, además, que un grupo de productores apostara por ambas modalidades con la misma capacidad de cura.
Nosotros estábamos sembrando y, a la vez, contratando y, a partir de un mayor aseguramiento de los recursos y de los incentivos para la compra de Moneda Libremente Convertible por parte de quienes cumplan los requisitos establecidos para el sol en palo, hubo campesinos que en un inicio asumieron el tapado y, luego, la otra modalidad, detalló.
Acotó que el volumen pactado representa un crecimiento de 605 ha con respecto al calendario anterior, pero recordó que en la campaña 2023-2024 en Sancti Spíritus, una de las plazas tradicionalmente reconocidas en Cuba, se contrajeron las siembras de manera significativa y se reportó la producción más baja de su historia.
El sol en palo disminuyó mucho por la falta de garantía de los recursos, la desmotivación de los productores ante la baja rentabilidad de la hoja y la mejor remuneración de otras cosechas, dijo Hernández Toledo quien refirió que el crecimiento que se registra ahora obedece a las formas de estimulación previstas si se cumple el contrato de siembra y se alcanza, como mínimo, un rendimiento agrícola de una tonelada (t) por ha.
Pese a que en algún momento puede faltar un recurso o entre tarde, el directivo señaló que el cultivo tiene un mejor respaldo, pues, contrario a otras etapas, la provincia cuenta con el fertilizante y los plaguicidas y, adicionalmente, entraron neumáticos, baterías, techos de zinc y la madera para impulsar la construcción de los 451 aposentos que se requieren.
Destacó que las limitaciones esenciales se concentran en algunas mangueras que todavía faltan por recibir y piezas para la reparación de los equipos de riego pequeños.
Al detenerse en la calidad de las vegas, Hernández Toledo aclaró que ya se están recolectando las primeras áreas plantadas en noviembre y diciembre, las cuales reportan un rendimiento promedio de 480 cujes por ha y eso es un indicador favorable para el tabaco principal porque representa cerca de una tonelada por ha, precisó.
Desde enero estamos en un periodo bastante seco lo que permite una calidad superior en el campo, pero, por otro lado, las fuentes de abasto de agua comienzan a agotarse y eso conlleva un gasto superior de combustible, expresó.
Insistió en que lo que se está recolectando son las áreas iniciales, las de los meses más óptimos, y que la intención es hacer dos cortes de capadura para suplir el bajo rendimiento que pudiera presentarse en las zonas sembradas en enero y febrero.
Sancti Spíritus tiene un plan de producción de mil 526 t, de las cuales 384 t son de tabaco tapado.