Las Tunas, 15 may (ACN) Una mirada al ayer y hoy del arte abstracto es el pretexto para que confluyan, en Las Tunas, exponentes de esta manifestación de la pintura a partir de su participación en el proyecto "La Cruzada".
Liusan Cabrera Almaguer, Eliade Avalo Rosales, Leonardo Fuentes Caballin, José Manuel Mayo y Miguel Mastrapa Cruz, protagonizan la exposición colectiva que se encargó de abrir las puertas del VI Encuentro Nacional de Pintura Mayo Abstracto, que se extenderá hasta el próximo día 18.
La proyección de continuidad del abstraccionismo, a pesar de sus vicisitudes históricas, le confiere carácter de fenómeno, provoca asombro y suscita una profunda reflexión acerca de su presencia y resistencia; como dijera Pedro de Oraá, a quien está dedicado el evento y cuyas palabras están recogidas en el catálogo de la muestra, que se expone en la filial provincial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
Mayo Abstracto propone un amplio programa que abarca conferencias, talleres de creación y la cobertura de todas las galerías de esta urbe oriental, explicó en conferencia de prensa José Manuel Mayo, uno de los líderes del proyecto "La Cruzada" en Las Tunas.
Con sede en el Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, los talleres de creación resultan el plato fuerte del evento, pues aportarán las obras para la inauguración del Salón Mayo Abstracto, previsto para la última jornada y ocasión para dar los resultados.
El encuentro entre figuras que se bifurcan, los colores, la mirada reflexiva frente a los cuadros que sugieren tantos universos como miradas de los públicos sean capaces de atraer, crea una mística realidad que va más allá del hecho artístico en sí, del momento de acudir al encuentro con los pintores y sus obras.
Pedro de Oraá, fallecido en 2020, fue crítico de arte, poeta, diseñador y traductor, sus aportes al movimiento abstracto cubano del concretismo en la década de 1950 y su participación en el grupo Los Once y Los Diez Pintores Concretos, lo llevaron a merecer premios como la Distinción por la Cultura Nacional, en 1995; y el Premio Nacional de Artes Plásticas, en 2015.
Desde hoy, Las Tunas se convierte en plaza de esta modalidad de las artes visuales con una cita, de carácter nacional, que apuesta por darle el valor que merece a la creación abstraccionista cubana desde la mirada pasada, presente y futura de sus artistas.