Nueva Gerona, 14 abr (ACN) Marisol Guillama —quien reconoce que su canto nació en Isla de la Juventud— es en la actualidad una de las cultoras más reconocidas de la música tradicional campesina cubana y en este 2024 celebra sus 30 años de carrera artística profesional.
Aunque nací en pleno corazón de La Habana, soy hija de padres guajiros. Provengo de una familia donde las décimas y los guateques eran “moneda corriente”. Tal vez, por eso cada recuerdo de mi vida está repleto de rimas y tonadas, refiere en entrevista exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias.
Desde muy pequeña aprendí escuchando a mis padres. De Emilia Pérez —tonadista— conocí los primeros secretos de la espinela cantada, sus tonos y cadencias de cada región de Cuba y de Mario Lorenzo Guillama — el gusto por los versos octasílabos, porque él era decimista, repentista, compositor, escritor y director de programas de radio, refiere con orgullo.
Cuenta que aún no había cumplido ocho años de edad, cuando su papá se había asentado en tierra pinera. El conocía mi interés por la música guajira, pero no podía permitir que su amor de padre sobrevalorara mi talento, por eso me presentó al maestro Ramón “Mongo” Rives, quien tras difíciles pruebas se convirtió en su mentor.
Logré salir airosa de esa etapa, dice y no puede evitar sonreír. Mis primeras actuaciones públicas fueron con su agrupación La Tumbita Criolla, desde entonces nació y creció mi amor por el Sucu Suco, un género musical que siempre ha estado presente en mi repertorio, comenta evidentemente atrapada por la remembranza.
Recuerda Marisol que en 1995 en el Festival del Creador Musical se alzó con una mención, al defender un tema de la autoría de su padre titulado “Mi Sucu Suco es así”, reconocimiento del jurado que para ella tuvo doble significación, por su papá y por Mongo Rives.
No había vacaciones ni receso escolar que no pasara en la Isla. Eso me dio la oportunidad de continuar cantando con la agrupación del Rey del Sucu Suco, así como con el conjunto Brisas Pineras. Con este último grabé muchísimos “Guateque Pinero”, programa de la emisora Radio Caribe y participé en festivales, actos y actividades culturales del territorio, narra.
Apunta que quizás esa sea la razón por la que muchas personas piensan que es pinera, vuelve a sonreír.
Comencé como profesional en la música guajira hace tres décadas. Me hace muy feliz el cariño del público. El modo en que disfrutan y siguen los géneros musicales de nuestros campos, a pesar de no recibir toda la promoción y el apoyo que le corresponde, una mueca delata su contrariedad.
Se anima y comenta que en todo ese tiempo ha enriquecido su repertorio, ha tenido presentaciones periódicas en cada una de las provincias e incluso en el extranjero.
Ahora estoy atareada en el rescate de viejas tonadas ya casi olvidadas y de géneros tan bellos y cubanos como la Guajira y la Criolla, a las que actualmente muy pocos cantores le ponen su voz, añade esta cantante que se reconoce como una mujer de su tiempo, a quien le toca hacer lo suyo para que no muera la música de la campiña cubana.
Esta es la música que se cultiva en mi familia hace más de siglo y medio, y aunque soy habanera por nacimiento, soy guajira por elección, afirma.