Poesía erótica y de espadas en los ojos desde Artemisa

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ACN - Cuba
Foto: Del autor
Joel Mayor Lorán
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17 Julio 2024

Artemisa, 17 jul (ACN) Los libros son la puerta para acceder al valor de la Avellaneda, la sensibilidad de Dulce María Loynaz, la irreverencia de Carilda Oliver y a los versos de Dimarys Águila García, la autora de El último de los heraldos, que pronto verá nacer mediante la editorial Unicornio.

   Natural de Güira de Melena e integrante de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), ha publicado Al Derecho y al Revés, El secreto de los parques (Antología Poética), En cuatro paredes, Los más fieles difuntos, 69 pasos, Colección Té con Limón y espera también por Legendario abismo.

   La salida a la luz de El último de los heraldos será otra dulce provocación, a través de poemas escritos en décimas, donde cuenta en versos una historia de amor, desde el sentimiento inocente y puro hasta el más íntimo y perverso viaje hacia el Eros.

   Águila García reveló a la ACN que se trata de renacimientos sin muerte, besos que solo el amor entiende por ser pequeños, sus andenes y viernes, su azufre y demonios, su abismo y su miel… y vivir el amor a plenitud. 

   Confirmó que para eso es la poesía, para imaginar mundos individuales donde el escritor y sus lectores se desnudan de ataduras y echan a andar con los sueños al aire.

   De las licencias que ella misma reparte en cada línea, sostuvo, podrá intuirse cuánto de sus fantasías hay en el personaje erótico construido verso a verso, o cuánto de esa lujuria natural hay en la dama que escribe.

   La joven diva del erotismo femenino en un siglo aún floreciente, se sirve de Carilda, de Gabriela Mistral, de Rubén Martínez Villena, del Indio Naborí… y les rinde un homenaje tal que resuenan los aplausos de sus fuentes de inspiración.

   Del 13 al 18 de agosto acudirá junto a la escritora y editora Dulce María Sotolongo a la Feria del libro de Panamá, declaró.

   En el país canalero presentará varios textos suyos, incluido Mago de montañas: Brújula para un adolescente, que aborda la sexualidad entre los adolescentes, basado en la entrevista a Adolfo Luis Malcolm Suárez, especialista de segundo grado en ginecología y obstetricia, y artista de magia.

   Audaz por antonomasia, esta güireña que cumplirá 45 años el próximo 15 de agosto, imparte talleres literarios; conduce y dirige la peña SEIS-NUEVE de literatura erótica, del Centro Cultural  Artex, en Artehabana; integra jurados de importantes certámenes; es editora de la revista chilena Es-Kupe, donde lleva la columna de Arte y literatura, y de la italiana Poetas por la Paz  y la Libertad de los pueblos.

    Dirigió durante tres años la Editorial Argos Iberoamericana, y colabora con los sitios digitales Cubasí, Razones de Cuba, Cubarte y el periódico Granma.

   Su obra ha sido traducida al inglés, turco, uzbeko, chino e italiano, entre otros idiomas, y publicada en periódicos, revistas y antologías nacionales e internacionales, incluso fue incluida entre Las Mejores Letras del Mundo, en 2021.

   Pero esta valerosa joven, que esgrime la cultura como escudo y espada de la nación, también ha recibido ciberbullying o terrorismo mediático de cubanos residentes en Estados Unidos, en el intento de atemorizarla, por defender una ideología diferente y agradecer a la Revolución la formación artística brindada de forma gratuita.

   “Me han amenazado continuamente con recaudar firmas para retirar libros de mi autoría de Amazon. ¿Su propósito? Que me retire de los medios digitales. Confían en sumar bajas de artistas e intelectuales de las redes sociales, para dejarles un escenario libre y continuar con la guerra mediática basada en desinformación y fake news.

   “Retirar de las redes sociales a los artistas activos con una clara visión de lo que acontece, con un público o seguidores que los aplauden, es el blanco principal hacia donde parece ir dirigida la flecha. Puede que el arte sea apolítico, como muchos manifiestan, pero los artistas no, y sin ellos el arte sería una utopía.

   “Si Revolución es cambio y transformación, el arte también lo es. Soy una artista revolucionaria, y lo seré siempre, con la valentía de defender mis principios e ideología desde lo que escribo, ya sea poesía política, feminista o de amor. El arte salva, y hoy más que nunca necesitamos de él”.

   No resulta casual, entonces, que igualmente plante bandera junto a Palestina, frente a los crímenes contra su pueblo.

   Por eso su poesía habla de niños que nacen con espadas sembradas en los ojos, de escombros y rosas en los dientes.