Lucha: el deporte más destacado en Cuba en 2024

Compartir

ACN - Cuba
Boris Luis Cabrera Foto: Juan Pablo Carreras
166
29 Diciembre 2024

La Habana, 29 dic (ACN) En este año que culmina, la lucha se alzó como el deporte más destacado de Cuba, un tributo al sacrificio, la técnica y la férrea voluntad de quienes ven en el tapiz un escenario para firmar epopeyas.

   En la Arena Campo de Marte de París, ubicada en la explanada del mismo nombre donde fueron masacradas decenas de personas durante la Revolución francesa, los gladiadores de la mayor isla del Caribe conquistaron cinco medallas, una de ellas de oro, para que su deporte concluyera en el quinto lugar por países en los Juegos Olímpicos.

La cosecha representó más del 50 por ciento de las preseas alcanzadas por la delegación cubana en esa cita estival, para demostrar que no fue casual lo logrado un año antes en los Juegos Panamericanos, cuando ganaron 16 metales (ocho dorados) y se proclamaron reyes del área.

Fue un resultado que retumbó en el corazón de los aficionados y marcó un hito en la tradición de un deporte que no conoce la rendición y donde el cuerpo y el alma se fundan en un abrazo épico.

La labor titánica de los entrenadores y el esfuerzo incansable de los atletas dibujaron en la capital francesa un mosaico de valentía y excelencia, liderados por una leyenda llamada Mijaín López, con su quinta presea preciosa consecutiva en el estilo grecorromano.

A la plata de Yusneylis Guzmán en la libre, se unieron los bronces alcanzados por  Milaimys Marín en el mismo estilo y los de los grequistas Luis Orta y Gabriel Rosillo, para completar una actuación memorable.

Detrás de cada campeón (y lo son todos aquellos que lograron escalar podios) hay un estratega, y en el caso de la lucha cubana, esos pilares se llaman Raúl Trujillo y Filiberto Delgado.

Trujillo es más que un técnico; es un visionario que ha sabido combinar ciencia, técnica y motivación para llevar a sus discípulos a la cima.

Bajo su guía, el estilo grecorromano cubano alcanzó el tercer lugar por equipos en París, un logro monumental que reafirma a Cuba como una potencia mundial en esta modalidad.

El liderazgo de este hombre ha sido clave no solo en la carrera de Mijaín, sino también en el desarrollo de otros talentos en los últimos tiempos.

Con su mirada aguda y su capacidad para leer cada combate como una partida de ajedrez, ha sido fundamental en la consolidación de una generación de luchadores que se niegan a ceder ante la adversidad.

Por eso, el ejecutivo de la Confederación Panamericana de Luchas Asociadas lo incluyó entre las 10 primeras personalidades que recibirán sus premios continentales, sinónimo de ingresar al salón de la fama y museo virtual de la entidad.

Por su parte Delgado, estratega y guía del equipo femenino de lucha libre, también recibió un reconocimiento histórico como entrenador con su entrada al Salón de la Fama de la Unión Mundial de Luchas en América, tributo a su dedicación y éxito formando atletas que hoy llevan el nombre del país a lo más alto.

La lucha cubana, con su historia llena de hazañas, nos recuerda que cada combate es una metáfora de la vida misma. En el sudor de sus gladiadores, en el eco de sus victorias y en la humildad de sus derrotas, late el corazón de una nación que encuentra en este arte ancestral su fuerza y ​​su esencia.

El horizonte que se vislumbra es intenso y desafiante. En el 2025, la lucha cubana se enfrentará a importantes retos, con torneos nacionales en todas las categorías que buscarán descubrir y forjar nuevas estrellas.

En la arena internacional, los segundos Juegos Panamericanos de la Juventud en Paraguay y el Campeonato Mundial en Croacia, serán escenarios claves para consolidar la grandeza de este deporte.