Artemisa, 27 jun (ACN) Muy próximo el comienzo de los Juegos Escolares Nacionales (JEN), qué mejor preámbulo sino enaltecer a quienes participaron en sus primeras ediciones, ganaron medallas y hasta se convirtieron en glorias deportivas; así ocurrió hoy en Artemisa, como a lo largo y ancho del país.
Entre tanta historia y epopeya prevaleció la emoción, al entregar el sello conmemorativo por la edición 60 del evento a atletas como Juan Laza Capote, el saltador con garrocha que debutó con bronce en los Juegos, y continuó elevándose hasta conquistar plata en un certamen internacional en la otrora República Democrática Alemana y oro en los XI Centroamericanos y del Caribe Panamá 1970.
Laza tomó el micrófono para agradecer que siempre se tenga en cuenta a los fundadores de los JEN, y recordó que fue el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, el creador de esa gran fiesta del deporte.
A los reunidos en el Mausoleo a los Mártires de Artemisa los conmovió también Oscar Martínez Cabrera, pues el sello resumía sus dos títulos de campeón de picheo en series nacionales de béisbol, su promedio de carreras limpias de 2.50, el anémico average en contra de 227 y la curva con la cual ponchó a tantos contrarios.
Condecorarle fue igualmente un premio a todo cuanto ha hecho después, al transmitir sus conocimientos y brindar ayuda técnica en varios países de América, Europa y Asia, incluidos Corea del Sur, Japón y, en la actualidad, a chicos y jóvenes en su tierra de Güira de Melena.
Recibieron el sello otros ases del territorio, como Orlando “Paponga” Ortega Vigoa, delantero de la selección nacional de fútbol, y Ángel Anacleto Sevillano Barrera, quien condujo al once juvenil al tercer lugar nacional y a los muchachos de la categoría sub 15 a la presea de plata en los XI Juegos Escolares.
Durante la cita se entregaron las distinciones Juan Tomás Roig Mesa y Rafael María de Mendive a trabajadores con más de 20 años en el sector, una actitud ejemplar, vastos méritos y una distinguida trayectoria.
Además, hubo un reconocimiento especial denominado Familia de Educadores a Bárbaro Díaz Castro, director de la Escuela de Iniciación Deportiva (Eide) Julio Díaz González y padre del estelar voleibolista de playa Noslen Díaz Amaro, por su contribución al desarrollo y fortalecimiento del movimiento deportivo cubano.