Las Tunas, 5 jun (ACN) Los municipios de Manatí, Puerto Padre y Jesús Menéndez, en el norte de Las Tunas, registran las mayores afectaciones en la provincia por la aridez de los suelos, un fenómeno que en los últimos años evidencia un sensible incremento debido a períodos de sequía más intensos y prolongados.
Estudios del cambio climático realizados por especialistas del Centro Meteorológico Provincial demuestran un acrecentamiento de las áreas en estos territorios debido, de manera especial, a dos factores determinantes como la temperatura y las precipitaciones.
Yusniel Alberto Núñez Acosta, investigador asociado de la entidad, refirió en exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias que la realización de un mapa basado en características cualitativas y cuantitativas del clima en la provincia, permitió determinar el aumento de estas zonas y otras en Majibacoa y el sur del municipio cabecera.
Tenemos como punto de partida el año 2021, agregó el experto, para el inicio del nuevo período seco, pues los gráficos indican una disminución de las lluvias de 1.5 milímetros (mm) como promedio cada año y el ascenso de las temperaturas en 0.9 grados Celsius, cifras que podrían tener mayores diferencias en los próximos calendarios debido al cambio climático.
Los pronósticos revelan una tendencia de mayores probabilidades para el aumento de las zonas áridas en la geografía tunera, situación que busca contrastarse con el incremento de la cobertura boscosa, el manejo acertado de los recursos naturales como el suelo y el agua y la gestación de proyectos ecológicos y resilientes en las zonas costeras y comunidades vulnerables.
El pastoreo de ganado mayor y menor, la producción agrícola y la subsistencia de especies endémicas y transitorias, son algunos de los grupos y actividades más propensas que podrían estar en riesgo durante las próximas décadas, acotó Núñez Acosta.
La deforestación de algunas áreas significa que exista menos evapotranspiración y disminuya la formación de nubes y, por ende, de lluvias; las tierras que hoy se manejan para la agricultura son más proclives para la aridez sino se hace de una manera acertada y con el procedimiento que lleva para no degradar los suelos.
Las Tunas es una de las provincias más secas del país, con solo mil 38 mm de precipitaciones cada año como promedio, lo que la convierte en uno de los territorios de mayor vulnerabilidad en la región ante los inminentes efectos del cambio climático.