La Habana, 1 jun (ACN) El sexto mes del año es el segundo del período lluvioso en Cuba y como promedio el más húmedo, estiman especialistas del Centro del Clima, del Instituto de Meteorología, en su habitual pronóstico sobre el particular.
Una parte considerable de sus acumulados ocurre asociada a precipitaciones de varios días de duración, sobre todo en las dos primeras decenas de estas 30 jornadas, aclararon.
Señalaron que dependen de la influencia de los sistemas propios de la zona tropical, tales como las ondas y las bajas, y de su interacción con los de las latitudes medias.
Sin embargo, advirtieron que la afectación directa de los ciclones tropicales es poco frecuente, pero cuando surgen suelen generar grandes aguaceros.
También en este mes acontecen lluvias relacionadas con el calentamiento diurno que generalmente están acompañadas de tormentas eléctricas.
No obstante, su período de gran actividad comienza en junio, aunque no de manera simultánea en todas las regiones del país, donde se manifiesta por un gradual incremento de la actividad hacia zonas del interior, durante la tarde y las primeras horas de la noche, agregaron.
De acuerdo con los profesionales del Centro del Clima, el actual evento El Niño - Oscilación del Sur (ENOS) continúa su debilitamiento.
Explicaron que las anomalías cálidas de la temperatura superficial del mar siguen su debilitamiento, aunque todavía se observan desde la región centroriental hasta la central del océano Pacífico, donde se localizan los mayores valores.
Al mismo tiempo, prosiguieron, las irregularidades de la temperatura subsuperficial del mar disminuyeron también de modo significativo desde noviembre hasta alcanzar valores negativos, propio del debilitamiento de este evento ENOS, incluidos los indicadores atmosféricos.
Consideraron que la mayoría de los modelos prevén que el presente ENOS finalice entre mayo y junio, cuando deben establecerse las condiciones neutrales.
Existen altas probabilidades de que un nuevo evento La Niña - Oscilación del Sur (AENOS) se desarrolle a partir de agosto por el hecho de que los océanos se han mantenido muy cálidos globalmente desde abril de 2023, estimaron.
Según sus cálculos, para junio debe haber precipitaciones por encima del promedio histórico en las tres regiones de la nación: occidente 307 milímetros, centro 289 y oriente 177, mientras las temperaturas serán de 31,3-32,5 grados Celsius, 31,5-33,1 y 31,8-32,4, respectivamente.