Ciego de Ávila, 11 abr (ACN) El frente de playa del Hotel Iberostar Pilar, categoría Cinco Estrellas en Jardines del Rey, al norte de Ciego de Ávila, recibe mejoras con el vertimiento de arena, acción que le dará más calidad al producto turístico que allí se ofrece.
Rafael Pérez Carmenate, delegado del CITMA en la provincia, informó en conferencia de prensa que como la instalación cuenta con plataformas que hacen función de pasarelas para el traslado de los turistas hacia el mar o la exposición solar, el objetivo es crearle una especie de duna de cinco mil metros cuadrados.
Explicó que el volumen de arena que se depositará, dos mil metros cúbicos en total, proviene de La Jaula, una zona de préstamo ubicada a una distancia que oscila entre los 700 y cuatro mil 400 metros de la costa y a 20 metros de profundidad, incluido en el contrato de las labores de dragado y vertimiento que se ejecutaron en marzo último en Playa Larga.
La mejora es una continuidad de la primera etapa de vertimiento de arena en Jardines del Rey en 2016 cuando fueron beneficiadas las playas Flamenco, Las Coloradas y El Paso, esta última en Cayo Guillermo, dijo el especialista.

Estas inversiones ascienden a más de ocho millones de pesos y han beneficiado nueve kilómetros de playa, que representan el 25 por ciento del área de baño en el polo turístico, mediante el bombeo y depósito de más de un millón de metros cúbicos de arena, sin alteraciones para las zonas de préstamo, añadió Pérez Carmenate.
Con anterioridad a estas mejoras se realizó un estudio de la erosión del área costera, que incluyó arrecifes coralinos, playas y lagunas, como parte de un programa integral para favorecer esos escenarios naturales, privilegiados con una fauna diversa.
Debido al incremento de los sitios de desarrollo programado para Jardines del Rey hasta el 2030, el sostenimiento de la actividad turística se concibe sobre la base de la planificación adecuada, para minimizar los efectos negativos del cambio climático.
También se continúan los monitoreos, el fomento de la educación ambiental y la capacitación comunitaria y del personal especializado, y construyen pasarelas para cuidar las dunas, en aras de mitigar el perjuicio que provoca en la naturaleza las edificaciones de todo tipo de instalaciones.
En el polo turístico avileño funcionan más de siete mil habitaciones en 17 hoteles, y existe, además, una variada gama de centros de recreación y de servicios.