Holguín, 5 nov (ACN) Una consulta infanto-juvenil para la atención a adolescentes embarazadas funciona ya en la provincia de Holguín como parte de los programas de control de este indicador, uno de los principales problemas de salud en el territorio.
Estos espacios, donde participa un equipo multidisciplinario de expertos, se ubican en cada área de la atención primaria y el Hospital Pediátrico Provincial Octavio de la Concepción y de la Pedraja.
Maite Blanco Lao, especialista en primer grado de Pediatría y Medicina General Integral, destacó a la ACN que esta consulta se suma al apoyo recibido durante el período de gestación y las adolescentes pueden encontrar un psicólogo a quien plantear sus miedos y dudas.
Subrayó que la principal estrategia encaminada a enfrentar la concepción en niñas menores de 18 años es la prevención y existe una infraestructura capaz de llevar a feliz término esta etapa una vez que se enfrentan a la decisión de ser madres.
En estos sitios se dan además charlas educativas sobre los métodos anticonceptivos y las infecciones de transmisión sexual, indicó Blanco Lao, también experta de la sección Materno Infantil en la Dirección General de Salud Pública.
Dentro del equipo multidisciplinario intervienen un pediatra, un obstetra, un trabajador social, un psicólogo y un especialista de medicina interna, aparte de las consultas generales de captación e integradoras.
En la provincia, refirió, se distribuye material didáctico dirigido a fomentar la maternidad y paternidad responsables en las secundarias básicas y preuniversitarios y están conformadas las aulas para padres donde se proporciona orientación sobre temáticas referentes a la sexualidad.
El embarazo en la adolescencia se ubica dentro de las principales causas de muerte materna en mujeres entre 15 y 19 años a nivel mundial y, al cierre del 2021, el 18 por ciento de los nacimientos en América Latina y el Caribe corresponden a gestantes en este rango de edad, según del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
En Cuba se han creado equipos multidisciplinarios en las 16 provincias con el objetivo de atender esta problemática psicosocial que tiene entre sus principales consecuencias el tardío control prenatal, incremento del aborto, mayor número de dificultades en el parto, riesgo de prematuridad y otras complicaciones médicas, además de deserción escolar, trastornos emocionales e inestabilidad en el hogar.